La retención premenstrual de líquidos es un fenómeno común asociado al ciclo menstrual se produce en la semana/periodo anterior a la menstruación. Este periodo suele ir asociado a hinchazón y aumento de peso. Los síntomas pueden verse exacerbados por malos hábitos alimentarios, que pueden provocar hinchazón de las mamas. Muchas mujeres experimentan retención de líquidos y aumento de peso corporal durante la fase lútea. La retención de agua puede deberse a los efectos de los estrógenos o al aumento de la secreción de vasopresina. Es importante tener en cuenta que el glucógeno muscular puede almacenarse en mayores cantidades durante la fase lútea, incluso cuando se sigue una dieta normal, lo que puede estar asociado a una mayor retención de agua cada gramo de glucógeno fija de 2 a 6 g de agua.
BREVES SOBRE LA CELULITIS
La celulitis, que afecta principalmente a los muslos de las mujeres, es un complejo de agua retenida con grasa. A veces retiene tanta agua que se hincha y duele. Los productos de desecho metabólicos y las toxinas, como los pesticidas, que el organismo no puede liberar fácilmente, suelen almacenarse en estas grasas. Se cree que son agua retenida en la celulitis
1) o irritación e hinchazón causadas por estas toxinas
2) o debido a que el cuerpo intenta diluir estas toxinas
AGENTES HIERBALES PARA COMBATIR EL EXCESO DE AGUA
Las hierbas diuréticas se han utilizado desde la antigüedad para una variedad de dolencias porque con ellas se pueden obtener resultados rápidos y eficaces. El mecanismo exacto de acción de las hierbas diuréticas sigue siendo objeto de investigación científica en la actualidad. Aunque hay algunos grupos de sustancias activas a las que se atribuyen tales efectos (por ejemplo flavonoides, componentes de aceites esenciales, saponinas, etc.), el aumento de la diuresis que se produce es el resultado de la acción combinada de varias sustancias activas y no puede atribuirse a uno (o a unos pocos) compuestos. Las hierbas diuréticas contienen uno de los grupos de compuestos mencionados anteriormente.
Previamente, se pensaba que el mecanismo de acción podría deberse a la dilatación de las arterias renales (aumentando así la excreción de agua), pero las observaciones apoyan la idea de que estas hierbas aumentan la excreción de agua pero no de iones. Por otra parte, los diuréticos sintéticos producidos artificialmente también afectan a la excreción de iones. En combinación con diuréticos sintéticos perdedores de potasio, el uso de diversas hierbas puede ser beneficioso porque pueden reducir la hipopotasemia (bajo nivel de potasio). Diferentes alimentos contienen potasio y sodio en una proporción de 2:1, hasta 150:1 para algunas plantas, por lo que pueden inhibir el desequilibrio electrolítico del cuerpo.
EL ABEDUL (BETULA PENDULA):
El abedul es una de nuestras plantas medicinales más utilizadas. El uso terapéutico de las hojas de abedul se remonta a la medicina popular antigua. En la VIII Farmacopea Húngara, la hoja de abedul es la droga seca oficial expresada como un flavonoide (hiperósido) de al menos el 1,5%.
Debido a su alto contenido en flavonoides, la hoja de abedul común es diurética y antiinflamatoria, así como antiséptica de las vías urinarias y los riñones. También se utiliza en el tratamiento de cálculos urinarios y renales, así como de edemas. Además de sus flavonoides (hiperósido, quercitrina, miricetina galactósido y otros glucósidos menores de quercetina, miricetina y kempferol), el abedul es también una fuente importante de potasio.
MALVA DAMA DE PLATA (HIERACIUM PILOSELLA):
La malva dama de plata es una hierba utilizada tradicionalmente, muy rica en cumarinas, taninos, flavonoides, terpenos, ácidos orgánicos, ácido ascórbico. Tiene propiedades diuréticas, especialmente en los miembros inferiores, y ayuda al organismo a eliminar rápidamente los productos de desecho acumulados.
Tiene un efecto diurético y puede utilizarse como fitoterapia para la hipertensión arterial, la obesidad y la celulitis, así como tratamiento coadyuvante para las afecciones urinarias. Por ejemplo, se ha utilizado durante décadas en la medicina popular polaca para prevenir la inflamación de la vejiga, la inflamación del riñón y la formación de cálculos renales.
TE DE JAVA - TE DE RIÑÓN (JAVA TEA, INDIAN KIDNEY TEA, ORTHOSIPHON):
Una hoja de té de tallo largo con un sabor intenso procedente de las zonas de gran altitud de la isla de Java. La hoja seca (droga) se caracteriza por flavonoides (sinenceína, eupatorina, escutelareína tetrametil éter, salvigenina, ramnazina), glucósidos de flavonol y cantidades significativas de derivados del ácido cafeico (ácido rosmarínico, tartrato y acetato de 2,3-dicaffeoyl). Además, se han descrito diterpenos (ortosifenoles), sesquiterpenos, saponinas triperpénicas y un alto contenido mineral, este último con una proporción significativa (alrededor del 3%) de sales de potasio.
La medicina popular del sudeste asiático la utiliza principalmente para problemas de vejiga y riñón, retención de líquidos y exceso de productos de desecho. Es una hierba relativamente nueva en Europa, su uso se basa en la utilización tradicional. Se recomienda como terapia de irrigación para enfermedades bacterianas e inflamatorias del sistema urinario. Cuando se utilice, debe procurarse aumentar la ingesta de líquidos. La Farmacopea Húngara VIII prescribe un contenido mínimo de 0,05 % de sinacetina, que se determina por cromatografía líquida utilizando un patrón de sinacetina.
Consuelda dorada (SOLIDAGO VIRGAUREA):
Conocida comúnmente como consuelda dorada, consuelda dorada de campo, artemisa moteada, cuyas propiedades diuréticas se conocen desde 1600, y es una planta nativa en Europa. También se utiliza como tratamiento y prevención (preventivo) de infecciones del tracto urinario inferior, cálculos renales y areniscas. Estos efectos están respaldados por estudios clínicos que muestran efectos antiespasmódicos y diuréticos, además de la experiencia adquirida en la medicina tradicional.
Contribuye al funcionamiento saludable del sistema urinario y favorece el buen funcionamiento de la vejiga y del tracto urinario inferior. Puede utilizarse bajo supervisión médica en presencia de cálculos renales comprobados, pero debe prestarse mayor atención a la ingesta adecuada de líquidos.
TARACK ROOTSTOCK DE TRIGO (AGROPYRON REPENS):
Nombres populares: hierba renacuajo, hierba tarack, tarack. Se utiliza desde hace mucho tiempo en la medicina popular por sus componentes diuréticos (diureticum). Puede utilizarse como suplemento en caso de cistitis, afecciones de la vejiga y cálculos renales. Es rica en componentes (los llamados metabolitos secundarios) que tienen una amplia gama de efectos terapéuticos y farmacológicos. El estragón de trigo se utiliza como diurético y para aliviar el dolor y los espasmos de las vías urinarias. También se utiliza con fines antiinflamatorios y tónicos.
Se utiliza mucho en niños para los trastornos de las vías urinarias (por ejemplo. enuresis e incontinencia), para aliviar los síntomas de trastornos de las vías urinarias, trastornos de la próstata, reumatismo, cálculos renales e infecciones de las vías urinarias (cistitis, uretritis, prostatitis). El manitol está presente en grandes cantidades en esta hierba y se conoce como un diurético osmótico estándar: es decir. se absorbe completamente en los intestinos y la mayor parte se excreta por los riñones. Al encontrarse en los túbulos del riñón, necesita retener más agua para mantener la presión osmótica. Las saponinas y la vainillina también tienen efectos diuréticos. El estragón se ha utilizado para limpiar las vías urinarias en épocas de infección por sus propiedades diuréticas y antimicrobianas.
Cola de caballo (EQUISETUM ARVENSE):
La medicina popular utiliza esta planta desde hace mucho tiempo como diurético, para tratar problemas renales, afecciones reumáticas y obesidad.
¿Sabías que? Desde hace tiempo se conoce su uso en el tratamiento de los cálculos renales. Su efecto es alcalinizar la química de la orina, lo que reduce el riesgo de formación de cálculos renales. La cola de caballo contiene silicio, que refuerza el tejido conjuntivo, el cabello y las uñas.
POTASIO Y CLORUROS:
El principal catión en el espacio del líquido intercelular. El tercer mineral más abundante en el organismo.
El sodio y los cloruros también son electrolitos, y si se altera el equilibrio entre estos minerales en el organismo, pueden verse comprometidos varios procesos vitales. Desempeña un papel esencial en el equilibrio de líquidos e iones y en la reducción de la hipertensión arterial.
MAGNOSIO:
El magnesio es uno de los minerales más importantes para una buena salud. Los estudios demuestran que no sólo es necesario para más de 300 reacciones enzimáticas, sino que también puede desempeñar un papel en la prevención o el tratamiento de muchas enfermedades crónicas.
Reduce la presión arterial y, como cofactor enzimático en los tejidos blandos, ayuda a mantener el equilibrio electrolítico del organismo. En ausencia de magnesio, se producen desequilibrios electrolíticos y una reducción de los niveles de potasio intracelular y extracelular, por lo que es importante garantizar una ingesta adecuada.
La falta de magnesio puede provocar una disminución de los niveles de potasio intracelular y extracelular